Ayer se declaraba autor de la muerte de Marta del Castillo, su ex pareja. Todo tiene tintes de una nueva muerte provocada por la intransigencia de quien se siente poseedor de la voluntad de la otra persona, por el mero hecho de ser mujer. Sin saber nada del caso , si me preguntaran de forma espontánea, mi respuesta sería la anterior, chica que decide romper con su pareja, y parece que este no ve con buenos ojos que lo abandone. Palabras esta de abandono, romper, etc utilizadas en su vertiente más coloquial. Tal vez la joven vio indicios de esta violencia , tal vez latente, o tal vez no. Puede ser que las campañas de concienciación que se han llevado a cabo, enfocadas a las jóvenes que ven actitudes posesivas en los jóvenes que tienen como pareja en un tramo de su vida, tuvieran su resultado y ella pensara que era mejor dejar esa relación antes de que cogiera tintes más graves. Pero no pudo concienciar al violento que todos y todas , tenemos derecho al libre albedrío, a decidir si seguir o no con una relación que no nos aporta nada. Por supuesto esto aquí descrito no es más que una hipótesis pero, por desgracia probable en los tiempos que vivimos.
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